Finestres indiscretes.




La ventana indiscreta son ahora algoritmos que dibujan la ruta de nuestros movimientos, nuestras fotos y ocurrencias, y le dan un sentido oblicuo a las cosas que hacemos. Con los perfiles de nuestros amigos, conocidos y seguidores han establecido curiosas y poderosas claves. Sobre nuestro muro deslizan anuncios y noticias que no buscamos, imágenes sutiles que distorsionan nuestros encuentros virtuales. Nos agrupan en algoritmos que nos definen y saben que nos sentimos solos y somos adictos a esos amigos que nos cuentan su vida y nos sonríen con emojis cariñosos. 

Ana Merino, Perfiles, El País 02/04/2018
https://elpais.com/elpais/2018/03/29/opinion/1522326337_517944.html

Comentaris

Entrades populars d'aquest blog

Percepció i selecció natural 2.

Gonçal, un cafè sisplau

"¡¡¡Tilonorrinco!!! ¡¡¡Espiditrompa!!!"