La vergonya destructiva.





En el libro Hiding from Humanity, Martha Nussbaum hace un análisis prolijo y pormenorizado del sentimiento de vergüenza con la intención de poner de manifiesto sobre todo los aspectos más negativos del mismo. Relaciona la vergüenza con el desagrado o el disgusto que manifiesta la sociedad hacia quienes quedan fuera de la normalidad que ella misma establece y preserva, razón por la que quienes se encuentran en tal situación se ven estigmatizados y marginados, cuando no totalmente excluidos. Son las sociedades con vínculos más comunitarios religiosos, étnicos, patrióticos las que pueden exhibir normas y criterios más claros y concretos, las más propicias a rechazar las conductas que tienden a desviarse de la norma. (…) Lo normal arrasa con todo lo que no se ajusta a la norma y produce el ensañamiento contra quienes no encajan en ella.

Ese sentimiento de vergüenza, que proviene del saberse fuera de lo normal, es el que rechaza Nussbaum. Y lo rechaza pensando sobre todo que el desagrado hacia lo que no es normal pueda utilizarse como fuente de legislación convirtiendo en ilegal cuanto produce disgusto a la mayoría. De hecho, así ha ocurrido durante siglos con todos aquellos que no encajaban en la normalidad. (114-115)

No le falta razón a Nussbaum par rechazar de plano y sin paliativos la vergüenza que nace del desagrado sentido por la mayoría hacia los más débiles o, sencillamente, hacia los que no son como ellos. Es un sentimiento profundamente antisocial que solo conduce a la marginación de los más vulnerables. (…) La vergüenza a la que se refiere Nussbaum es una “vergüenza primitiva”, un sentimiento de fracaso por no alcanzar el estado supuestamente ideal porque así lo establece la mayoría. Lo que hay que preguntarse es quién ha definido ese estado ideal y con qué fines. (…) secularmente, a la mujer se la ha educado para sentir vergüenza, vergüenza cuando no se ajustaba al tipo ideal, al deber ser que el hombre encargó de definir para ella. (116-117)

Victoria Camps, El gobierno de las emociones, Herder, Barcelona 2011

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