Pecat original.

El “pecado original” no es una cuestión religiosa: es una cuestión antropológica.

Sólo siendo conscientes de la profunda fisura dentro de la psique humana, sólo reconociendo ese abismo que abre nuestra capacidad para el mal (la libertad humana es también la posibilidad del mal), tendremos opciones para contenerla.

¿Una antropología pesimista? O más bien el realismo de tratar de mirar de frente también hacia las realidades desagradables…

El optimismo pazguato del keep smiling nos deja desvalidos ante la profundidad de la tragedia humana. Saber que somos capaces de infierno es lo que posibilita –si nos acompaña suficiente prudencia y buena fortuna— evitar el infierno
“El mal no es espectacular y siempre es humano”, escribía W.H. Auden en su poema “Herman Melville”, en 1939.
(Quienes me conocen saben cuánto me gusta el prolífico escritor británico Terry Eagleton. Aprovecho la ocasión para recomendar un buen tratado suyo de teología marxista laica: Sobre el mal, Península, Barcelona 2010.)

Jorge Riechmann, la fisura en la psique humana, tratar de comprender, tratar de ayudar, 26/01/2012


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