Fernando Savater, L’heroi com a projecte moral









La ética pertenece al orden épico porque trata de la acción. (…) la acción es enfrentamiento y edificación, riesgo y mesura, arrojo, fidelidad e innovación, búsqueda de la eficacia más vital y perdurable (…) (73)

Todas estas categorías están recogidas y ascendidas en la categoría de héroe.

… la ética busca ante todo la fuerza, es decir, el aliento para vivir la mejor posibilidad de lo humano, no la más menesterosa o la menos comprometida.

… la ética se ocupa inmediatamente del querer humano, del contenido y la estructura de su voluntad. Preguntarme por lo que debo hacer o por la acción mejor entre varias, indagar los criterios de acuerdo a los cuales valorar y justificar las decisiones de mi libertad, todo ello viene a condensarse en un pregunta fundamental, que es el objeto formal de la ética toda: “¿Qué quiero yo realmente?” (73)

… si se preocupa de las virtudes -cuyo nombre proviene de vir, fuerza excelente- no es en cuanto pretensión de establecer un código más o menos orientador de acuerdo con cuyos preceptos juzgar las conductas …

… ¿qué significa ser fuerte?, ¿cuáles son la virtudes?, ¿cómo poseerlas y ejercerlas? El héroe, en todas las tradiciones, es ante todo fuerte y ser fuerte significa algo asombrosamente parecido en la mayoría de las culturas: ser fuerte es ser intrépido y generoso. No temer la destrucción física por encima de todas las cosas, no retroceder ante lo que debe u puede ser hecho (…). La fuerza del héroe es el cumplimiento de lo que nos prometemos como virtud. (73-74)

Héroe es quien logra ejemplificar con su acción la virtud con fuerza y excelencia. (74)

Sin Dios ni Razón ni Estado que justifiquen de modo absoluto e inapelable los valores, la búsqueda del sentido de la acción se convierte en una aventura personal y problemática, llena de contradicciones, de opiniones casi intuitivas y de desgarramientos, en una palabra, se convierte en una peripecia heroica. (75-76)



Fernando Savater, El contenido de la felicidad, Barcelona, Círculo de Lectores/El País 1987

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