La ciència de l'error.




Normalmente, concebimos el conocimiento como la búsqueda de “la verdad”, que entendemos, además, en términos de racionalidad, universalidad, precisión, exactitud o certeza.

Seguramente se trata de una vieja herencia, a la vez filosófica y teológica, que ha visto en el conocimiento un trasunto de los modos divinos de conocimiento o un medio para reconectar con un ámbito ontológico superior, al modo de las ideas platónicas.

Aunque algunas corrientes filosóficas –como el escepticismo y el cinismo helenísticos, el nominalismo medieval, el humanismo renacentista o el empirismo ilustrado– tratasen de rebajar esta noción del conocimiento, lo cierto es que nunca dejó de ser dominante, y, todavía hoy, cualquiera de nosotros tiende a definir el conocimiento como la búsqueda de la verdad.

Sin que eso suponga rechazar totalmente la idea de verdad (que, ciertamente, debe ser repensada), resulta interesante cambiar, por un momento, nuestra perspectiva, y pensar que nuestro sistema cognitivo no tiene como objetivo la búsqueda de la verdad (mediante una percepción exhaustiva, una memoria exacta, un lenguaje preciso o un razonamiento infalible), sino la supervivencia

Por esta razón, el objetivo de nuestro sistema cognitivo sigue siendo el de la adaptación al medio, o supervivencia, lo cual exige, básicamente, actuar rápido y con pocos datos.

Para sobrevivir, no necesitamos percibirlo todo, sino solamente ver lo necesario para ubicar el peligro o la comida. Tampoco necesitamos recordarlo todo con precisión fotográfica, sino solamente aquello que nos permita actuar ante situaciones semejantes. Y tampoco necesitamos, finalmente, razonar con total frialdad, puesto que en esas situaciones pueden ser útiles algunos atajos cognitivos.

Muy al contrario, percibir, recordar o razonar en exceso puede resultar letal, pues nos llevaría a detenernos o a confundirnos, saturados por el exceso de información.

Bernat Castany Prado, De la utilidad y la inutilidad del error para la vida: sobre "Nuestra mente nos engaña" de Helena Matute (I), PliegoSuelto 11/01/2020

Continuació:
Los sueños de la razón producen monstruos
Las dos caras del conocimiento
Usos y abusos políticos de la ciencia del error

Comentaris

Unknown ha dit…
Look at the way my colleague Wesley Virgin's tale starts with this SHOCKING and controversial VIDEO.

You see, Wesley was in the military-and soon after leaving-he found hidden, "mind control" secrets that the government and others used to obtain everything they want.

As it turns out, these are the exact same tactics lots of famous people (especially those who "come out of nowhere") and elite business people used to become rich and famous.

You probably know how you use less than 10% of your brain.

That's really because the majority of your brain's power is UNCONSCIOUS.

Perhaps this expression has even taken place IN YOUR own brain... as it did in my good friend Wesley Virgin's brain about 7 years back, while driving an unlicensed, beat-up garbage bucket of a vehicle with a suspended license and $3 on his bank card.

"I'm very fed up with living paycheck to paycheck! Why can't I turn myself successful?"

You took part in those types of questions, isn't it right?

Your success story is going to happen. You need to start believing in YOURSELF.

CLICK HERE TO LEARN WESLEY'S SECRETS

Entrades populars d'aquest blog

Percepció i selecció natural 2.

Gonçal, un cafè sisplau

"¡¡¡Tilonorrinco!!! ¡¡¡Espiditrompa!!!"